Editorial 36

Parece osado afirmar que sin las contribuciones de las ciencias humanas y sociales la contractualidad que garantiza nuestra convivencia social no será suficiente para hacer frente a la ganancia tanatofílica de la sociedad actual que, no solamente volvió insostenible la vida en el planeta, sino que promovió la más abismal desigualdad social y económica entre grupo sociales de la historia humana. Por lo tanto, es necesario, cada vez más, reiterar que solamente mediante la permanente reflexión que estas áreas promueven – acerca de lo que somos, hacia donde vamos, y cómo comprender nuestros impases al hacer vínculos y sociedad – podemos establecer los pactos que nos han permitido vivir, amar a los otros, trabajar y, sobre todo, valorar la vida. Esto se refleja, por ejemplo, en el campo de las discusiones sobre la familia y la juventud. La mentalidad economicista de nuestro tiempo diseminó concepciones de la infancia como un “costo” para la sociedad de los adultos que pueden, como máximo, considerarla como una “inversión”. Al final, los niños y sus demandas representan un “gasto” que, en esta línea, es siempre asumido como una benevolencia de la sociedad adulta. Pues bien: los científicos humanos y sociales cuyo interés es la infancia y la juventud, por ejemplo, apuestan que no es posible humanizarse sin la presencia real y fantasmática de la infancia. Y ésta es siempre un campo tanto de interrogación como de desciframiento. ¿Será porque tal presencia evoca una ontología del “entre” – de los vivos y de los muertos, simultáneamente – como nos enseñan las cosmologías indígenas (TASSINARI, 2007), o por otra, una ontología que se sitúa entre la nada y la vida, al ser anunciada justamente desde el inicio, el nascimiento, como indaga Lyotard (1991) inspirándose en Hannah Arendt? Interrogar y buscar descifrar la infancia propone articular esta misma condición paradojal a la adultez. Así, vale cuestionar, ¿somos lo que decimos ser, como adultos? ¿Somos lo que queremos ser?

En esta 36ª edición de DESIDADES, presentamos siete artículos con enfoque específico en la infancia, uno con enfoque en la juventud, y otro que abarca tanto a la infancia como a la juventud. En este conjunto de trabajos, los/as autoras discuten no solamente cómo la presencia de los niños, niñas y jóvenes modela y transforma las formas adultas de habitar y producir el mundo humano, como también resulta en desmentidas sobre los ideales y valores que se profesan como orientadores de nuestra acción en el presente. Si, por ejemplo, la constitución del campo de las políticas para la infancia y la juventud expresa la voluntad vacilante del cuidado de una sociedad adulta en relación a sus otros, niños y jóvenes, se hace necesario aproximarse a cómo los discursos sociales operan y hacen producir – o no- esa realidad de cuidado. En tres artículos, Una etnografia interescalar sobre políticas de la primera infancia, Juventudes e Políticas Públicas: ensaiando reflexões sobre os desafios e potencialidades da atuação psicossocial y Educación indígena en Costa Rica. Infancia, juventud y aulas hacia el siglo XXI, los autores y autoras exploran el análisis de las prácticas y políticas de intergeneracionalidad, sea del cuidado o de la educación formal, problematizando las metodologías que permiten el acceso y la lectura de estas realidades intergeneracionales. Así, de importancia fundamental para comprender cómo presencia de los niños y niñas se inscribe en el mundo social, constituye la conceptualización metodológica de la investigación que da forma y cuerpo al que se quiere investigar demandando el análisis sobre la reflexividad en la investigación. Este aspecto es enfocado y discutido en los artículos Difracción, trabajo de campo y voz infantil, El columpio del tempo y algunas reflexiones para explorar las memorias de infancia y O uso de narrativas literárias na prática de avaliação psicológica infantil.
¿Podemos conocer mejor qué adultos somos, y cuál es la sociedad adulta que permitimos construir, mediante investigaciones que toman como interés a los niños, niñas y jóvenes? Pregunta que demanda investigaciones sobre cómo los niños, niñas y jóvenes aprenden y aprehenden lo que los adultos valorizan – tanto explícitamente como mediante el análisis de los no dichos. Los últimos, frecuentemente, desmienten lo que se profesa como valor y norma. En los artículos Niños y regalos: aprender a dar y a recibir en el contexto doméstico, Castigo como prática de cuidado? Reflexões a partir de uma etnografia com crianças cabo-verdianas, como también en la propia reseña presentada en esta edición, Um fazer coletivo em tempos de pandemia, los modos de hacerse adulto concomitantemente a los modos de hacerse niño son colocados en análisis frente a las cuestiones fundamentales de nuestra sociedad como la dádiva, la violencia y las epidemias. Y, convergentemente, la cuestión de la violencia también es analizada en el contexto amoroso de jóvenes en el artículo Violência no namoro para jovens universitários à luz do Paradigma da Complexidade.
En la Sección de Relevamiento Bibliográfico, además de la reseña ya mencionada, traemos para el público lector información sobre 24 obras encontradas en las áreas de las ciencias humanas y sociales de los países de América Latina sobre infancia, adolescencia y juventud. El relevamiento contempló libros publicados en el período de diciembre de 2022 a agosto de 2023, cuyas informaciones pudieron ser obtenidas en los sitios web de sus respectivas editoriales.
¡Deseamos buena y provechosa lectura a todos y todas!

Lucia Rabello de Castro
Jefa de Edición

<strong><h2>Referências</h2></strong>
LYOTARD, J-F. <strong>Lectures d’enfance.</strong> Paris: Galilée, 1991.
TASSINARI, A. Concepções indígenas de infância no Brasil. <strong>Tellus</strong>, ano 7, n. 13, p. 11-25, 2007.

Bajar PDF
del artículo completo