Conclusión
A partir de la convergencia entre las informaciones de las tres etapas metodológicas fue posible afirmar que estamos ante un grupo heterogéneo. Los jóvenes participantes en la investigación equilibran su escepticismo ante el futuro con la confianza en que vendrán días mejores para si mismos, mientras difieren en relación a los medios para alcanzar esas mejoras. Piensan en política pero sus actuaciones aún son tímidas.
El año electoral suscitó narrativas de escepticismo en torno al sistema político. En el cuestionario y en las investigaciones nacionales menos de la mitad de los jóvenes se interesa por el tema de la política, aunque lo juzgue importante. Aunque se reconozcan en un contexto democrático, los jóvenes entrevistados no se sienten representados por personas ni instituciones. Aún cuando citan otras formas de organización como posibilidades de acción, pocos afirman participar en movimientos en ese sentido. Las movilizaciones sociales que marcaron el año 2013 tampoco parecen representar una forma de manifestación política o ejercicio de la ciudadanía en la cual ellos se reconozcan. De modo general, hubo silencio o desdén en torno a las posibilidades y móviles de ese hecho. El escenario político, económico y social del país desagrada, mas existe una aparente pasividad en relación al tema y una evidente desesperanza.
En ese sentido, a partir de las declaraciones de los jóvenes de esta investigación, fue posible percibir que no son cuestiones de carácter colectivo y social las que están movilizándolos, sino, por lo contrario, es su mundo personal lo que los angustia y moviliza. La mayoría de los jóvenes consultados revela una profunda preocupación por su futuro profesional y financiero. El desempleo, el alto costo de la vida y la dependencia financiera de los padres o tutores, se destacan como los principales factores de inquietud y agobio. Los jóvenes se preocupan por el porvenir pero tienen dificultades para identificar los medios para incidir sobre sus realidades. En este sentido se perciben casi como predestinados a una existencia desconfortable y precaria. Mientras, paradójicamente, ellos creen en un futuro mejor para sus vidas pero no para el ámbito colectivo. Parece existir una esperanza individual basada en las competencias propias y el esfuerzo personal, demostrando cómo el discurso de la meritocracia está presente en la ideología ampliamente difundida en el espacio social y manifestada en el discurso de los jóvenes.
En este punto es posible afirmar que el contexto sociopolítico de Brasil y del mundo, en la esfera más amplia, se relaciona de forma directa con estos malestares. Desde el 2008 el mundo pasa por crisis económicas severas. Europa, que fue siempre modelo de confort y prosperidad, se recupera con dificultades de sucesivas crisis y aún existen altas tasas de desempleo entre los jóvenes. Italia, Portugal y Francia observan a sus gobernantes14 alterar sus estatutos laborales, imponiendo la pérdida de seguridades sociales históricas. En América Latina no es diferente. Aunque Brasil haya experimentado un contexto de aumento del empleo formal, los jóvenes aun constituyen el grupo etario más vulnerable ante el desempleo, la desocupación y los vínculos de trabajo precarios. Según datos del Registro General de Empleados y Desempleados (Caged)15, el 2014 cerró con un decrecimiento del 64% en relación al año anterior en cuanto a la creación de empleos formales. De este modo, es posible afirmar que existe una insatisfacción sentida y expresada por los jóvenes y un contexto socioeconómico que la favorece y la justifica.
Siendo así, encontrar medios para solucionar problemas que son comunes a este grupo etario es el desafío que se coloca ante el poder público pero también ante los propios jóvenes. Los discursos enunciados en las ruedas de diálogo mostraron una aparente soledad. La angustia se deriva de un sentimiento de aislamiento y de la ausencia de horizontes. En este sentido, nos parece claro que el primer paso es la comprensión por parte de los jóvenes de que se trata de una problemática global y lo segundo es el reconocimiento de su potencial como agentes de cambio. Como evidenció el estudio “El sueño brasileño de la política”, de la agencia Box 1824, existe un grupo aun minoritario pero con gran fuerza de movilización, que ve en la crisis una apertura para el encuentro y la innovación. La manifestación de junio mostró que la comunicación en red es capaz de promover pequeñas pero significativas perturbaciones en los consensos. La práctica de reuniones, asambleas y actos indicó que una vez más, identificadas las demandas, los jóvenes son capaces de reunirse y movilizarse por causas que juzgan importantes. Los movimientos globales han demostrado el papel central de la juventud en esos procesos. Las ocupaciones desde Wall Street, pasando por Madrid, Estambul y, más recientemente, Hong Kong, aunque sin liderazgos, tienen en común un fuerte protagonismo de la juventud de esas ciudades.
De manera que, si por un lado esos movimientos evidencian una crisis de representatividad aguda, ellos también evidencian otras formas de organización y nuevas posibilidades de acción política. La autonomía de los participantes, la horizontalidad y las construcciones colectivas propias de esas manifestaciones globales en pro de la democracia son evidencias de una nueva forma de organizarse. Identificar las posibilidades de resignificar la política es el desafío que estos jóvenes tienen por delante.
15 – Cadastro Geral de Empregados e Desempregados (Caged)
http://g1.globo.com/economia/noticia/2015/01/pais-criou-396993-vagas-de-emprego-formais-em-2014.html
Referencias bibliográficas
BOX 1824. O sonho brasileiro da política. Disponível em: http://sonhobrasileirodapolitica.com.br/ Acesso em: 8 de outubro de 2014.
KORMAN DIB, S.; CASTRO, L. R. de. O trabalho é projeto de vida para os jovens? Cadernos de Psicologia Social do Trabalho (USP), vol. 13, n. 1, pp. 1-15, 2010.
FAMECOS/PUC-RS. Perfil do Jovem Brasileiro. Disponível em: http://portal.eusoufamecos.net/estudo-da-famecos-revela-comportamento-do-jovem-brasileiro/ Acesso em: 1 de setembro de 2014.
FUNDAÇÃO PERSEU ABRAMO. Perfil da Juventude Brasileira. Disponível: http://www.fpabramo.org.br/uploads/perfil_juventude_brasileira.pdf Acesso em: 8 de outubro de 2014
SECRETARIA NACIONAL DE JUVENTUDE. Pesquisa Nacional sobre Perfil e Opinião da Juventude Brasileira. Disponível em:
http://www.ipea.gov.br/participacao/images/pdfs/participacao/pesquisa%20perfil%20da%20juventude%20snj.pdf Acesso em: 1 de setembro de 2014.
Resumen
A partir de una experiencia de investigación para la realización de una serie destinada al público joven, el siguiente artículo expone las expectativas de ese grupo etario en relación al futuro, el trabajo y la política. Integrando datos estadísticos y declaraciones, concluimos que el futuro en la narrativa de los jóvenes está permeado por incertidumbres y el momento de inserción profesional es vivenciado entre tensiones y dudas. Sumado a eso, el contexto sociopolítico no inspira confianza y existe un sentimiento difuso de escepticismo en torno a la política y las instituciones. Este texto tiene como objetivo describir brevemente el proceso de la investigación – las estrategias metodológicas y los enfoques de análisis –, así como presentar algunas conclusiones sobre el modo como los jóvenes manifiestan las angustias generadas por sus experiencias en torno al trabajo, la política y el futuro. La elección de estos temas se deriva de la percepción del lugar central que ocupan en el discurso de los jóvenes, lo cual expresan en forma de malestares y conflictos vinculados al proceso de vivir el presente y pensar el futuro.
Palabras clave: juventud, futuro, trabajo, política.
Fecha de recepción: 13/03/15
Fecha de aceptación: 02/07/15